Abre la Mente y Busca

"Somos USTEDES en el futuro"

A través de este "Presente de Dios" - se le permitió a Laura mirar desde su propio ser omnipresente, en "el Espejo en el cual se puede ver todo el Mundo".

A través de este Espejo, los Cassiopaeans le enseñaron a Laura que el tema del Santo Grial era verdaderamente importante. Era evidente que se trataba de un tema mucho más complejo de lo que muchos académicos y buscadores del Grial han supuesto. Las comunicaciones con los Cassiopaeans también llevaron a Laura a entender que la búsqueda del Santo Grial y la "Búsqueda de la Piedra Filosofal de los Alquimistas" eran lo mismo. Aún más, los Cassiopaeans dejaron muy en claro que el hombre alrededor del cual se formó la leyenda de Jesús era un practicante de esta antigua tecno-espiritualidad y que las imágenes de la "crucifixión" no eran más que metáforas alquímicas.

Laura comenta:

Cuando era una niña, siempre me atrajeron las historias del Rey Arturo y sus caballeros de la Mesa Redonda. Era algo natural, considerando mi patronímico de nacimiento: Knight (En Español: Caballero) En consecuencia, muchos libros sobre la materia fueron leídos y digeridos a una edad muy temprana.

Pero mi opinión general de ellos cambió a medida que fui creciendo. No existía un Grial "real"; sólo se trataba de un cuento muy bonito.

Eran historias agradables para leer e imaginar en momentos de ocio, sin embargo sentía que tenía que realizar el VERDADERO trabajo de "encontrar a Dios". No me di cuenta que, en un sentido muy real, esta es la verdadera naturaleza de la búsqueda del Grial. En cualquier caso, pasé muchos años concentrándome en este asunto de encontrar a Dios. Para mí era algo tan esencial como lo era respirar.

Comencé con premisas muy básicas: sin creer en nada, probándolo todo; y al pasar de los años encontré mi camino pasando de las ciencias duras a las ciencias más "suaves" y a las "ciencias paranormales." Analizaba y clasificaba todo a medida que iba leyendo y al "final" creía haber recorrido la gama entera de los conocimientos. Mis clasificaciones eran más variadas y extensas que las de muchas otras personas, sin embargo, no dejaban de ser clasificaciones - y yo me había más o menos reconciliado con la idea de no poder llegar a conocer a Dios nunca si no era a través de la "mente" y la mente era, después de todo, hasta donde yo podía ver, el comienzo y el punto final de todo. Cogito ergo sum. Eso era todo lo que podíamos saber. Yo no era feliz con esta respuesta, pero ¿qué otra cosa había?.

Y así es como las cosas anduvieron tranquilas hasta los eventos que relato en mi autobiografía: Amazing Grace; eventos que llevaron a las comunicaciones con los Cassiopaeans. Y entonces, la Búsqueda comenzó en serio.

Una evidencia y un conocimiento nuevos pueden cambiar completamente toda la base de lo que creemos saber. Y esto es, por supuesto, parte del problema del Grial. Todos construyen hipótesis basadas en lo que se halla generalmente aceptado en el contexto de "investigación ordinaria" o sobre la base de suposiciones acerca de nuestra realidad que son parte del entorno social y cultural en el cual vivimos. Y porque estamos tan dedicados a nuestras creencias fundamentales sobre la naturaleza de nuestra realidad, nos involucramos emocionalmente con estas hipótesis - o sea, nos atamos emocionalmente - y cuando nuestra atención es atraída hacia algún tipo de información nueva, no sólo no QUEREMOS oírla o verla -simplemente, no podemos.

Comenzando con un estado de bancarrota psíquica en 1984, los Cassiopaeans -yo en el futuro- pasaron 10 años ayudándome a salir de mis suposiciones sobre cómo percibimos nuestra realidad. Yo había rezado fervientemente pidiendo respuestas y el Universo comenzó a responderme en las dinámicas de mi propia vida. En cierto momento, cuando hube pasado muchas pruebas, el modo de comunicación se volvió más directo y consciente - convirtiéndose en las transmisiones de los Cassiopaeans - y entonces se hizo evidente que la Búsqueda del grial era verdaderamente importante.

Durante los años de esta iniciación, fui guiada a revisar muchos de los textos que había descartado despreocupadamente en mi juventud, de esta forma, debía leerlos nuevamente "entre líneas" con mis "nuevos ojos". Los Cassiopaeans también sugirieron líneas de estudio e investigación que no habían sido parte de mi trabajo previo. Entre los textos que fui guiada a considerar estaban los trabajos del alquimista Fulcanelli.

Hay muchas "teorías" sobre quién pudo haber sido Fulcanelli. La mayoría de ellas no tiene en cuenta toda la información disponible y, como muchas otras teorías, son exactamente como Laura las ha descrito arriba: "Todos construyen hipótesis basadas en lo que se halla generalmente aceptado en el contexto de "investigación ordinaria" o sobre la base de suposiciones acerca de nuestra realidad que son parte del entorno social y cultural en el cual vivimos…" Dejando de lado el asunto de quién pudo haber sido o no Fulcanelli, un tema que Laura ha tratado en su libro Historia Secreta del Mundo, lo que sigue es un pasaje sobre la Transformación Alquímica:

Lo que es más, en nuestra opinión, no parece suficiente saber cómo reconocer y clasificar los hechos exactamente: uno debe cuestionar la naturaleza y aprender de ella en qué condiciones y bajo el control de qué, tienen lugar sus variadas producciones. En verdad, la mente filosófica no se contentará con la mera posibilidad de identificar cuerpos. Demanda el conocimiento del secreto de sus elaboraciones. Abrir a medias las puertas del laboratorio donde la naturaleza mezcla sus elementos es bueno; descubrir la fuerza oculta bajo cuya influencia se realiza su trabajo, es aún mejor. […]

La Alquimia es oscura sólo porque se halla oculta. Los filósofos que querían transmitir la exposición de su doctrina y el fruto de sus trabajos a la posteridad tuvieron mucho cuidado de no divulgar el arte, presentándolo bajo un forma común, para que el profano no lo usara equivocadamente. De esta forma, debido a la dificultad que uno tiene en entenderla, debido al misterio de sus enigmas y a la opacidad de sus parábolas, la ciencia ha sido acallada entre ensueños, ilusiones y quimeras. […]

Con sus textos confusos, salpicados de expresiones cabalísticas, los libros continúan siendo la causa genuina y eficiente del grave error que indicamos. Porque, a pesar de las advertencias…los estudiantes persistían en leerlos de acuerdo al significado que poseen en lenguaje ordinario. No saben que estos textos están reservados para los iniciados y que es esencial, para poder entenderlos, poseer la clave secreta. Uno debe primero trabajar para descubrir esta clave secreta.

Ciertamente estos viejos tratados contienen, si no la ciencia completa, al menos su filosofía, sus principios, y el arte de aplicarlos en conformidad con las leyes naturales. Pero si no tenemos el conocimiento del significado oculto de los términos - por ejemplo, el significado de Ares, que es diferente de Aries - títulos extraños usados en la composición de dichas palabras, no entenderemos nada o caeremos infaliblemente en el error.

No debemos olvidar que es una ciencia esotérica. Como consecuencia, una inteligencia aguda, una memoria excelente, trabajo y atención ayudados por una inquebrantable fuerza de voluntad NO son cualidades suficientes para convertirse en un conocedor de esta materia. Nicolás Grosparmy escribe:

"Tales personas verdaderamente se engañan a sí mismas al creer que sólo hemos hecho nuestros libros para ellas, cuando los hemos hecho para mantener alejados a todos aquellos que no son de nuestra secta".

Bastdorff, al comienzo de su tratado, benévolamente advierte al lector en estos términos:

"Toda mente prudente debe primero adquirir la Ciencia, si eso está a su alcance; o sea, los principios y los medios para operar. De otra forma debería detenerse allí, sin usar tontamente su tiempo y su riqueza. Y así, ruego a aquellos que lean este pequeño libro, dar crédito a mis palabras. Les digo una vez más, que ELLOS NUNCA APRENDERÁN ESTA CIENCIA SUBLIME POR MEDIO DE LIBROS, Y QUE ÉSTA SÓLO PUEDE SER APRENDIDA A TRAVÉS DE LA REVELACIÓN DIVINA, DE AHÍ QUE RECIBA EL NOMBRE DE ARTE DIVINO, o a través de los medios de un buen y fiel maestro; y debido a que hay muy pocos de ellos a quien Dios les ha concedido su gracia, hay también muy pocos que la enseñan." [1]

Laura escribe sobre la Experiencia Iniciática del Experimento Cassiopaea:

Las sesiones con los Cassiopaeans eran, frecuentemente, bastante personales. Esto era consecuencia de los tremendos cambios que ocurrían en mi vida, muchos de los cuales ocurrían en algún otro nivel de realidad y podían ser percibidos vagamente y "a través de un espejo oscuro". Cuando echo un vistazo hacia los eventos pasados, las transformaciones, puedo ver el patrón. Pero en aquél momento no podía ver nada más que la lucha desesperada por "normalizar" y "estabilizar" mi mundo, el cual se volvía cada día más extraño.

En retrospectiva, ahora comprendo que mi vida era la recreación de un drama - una visión atemporal- derivado de la mitología de los tiempos antiguos que es en todas partes el mismo. Y, habiendo pasado a través de este "guión" inicial, escribo estas páginas como un esfuerzo por transmitir lo que estas historias nos enseñan.
En mi investigación sobre el origen y significado de la experiencia de los Cassiopaeans, he profundizado en el trabajo de muchos que ya han estado ahí antes, en un esfuerzo por resolver el Gran Misterio. Hoy en día, hay arqueólogos excavando evidencia alrededor del globo; etnólogos registrando historias de pueblos del Este y del Oeste; y una generación de orientalistas nos han revelado los escritos secretos de los antiguos pueblos que dieron a luz a nuestras religiones y culturas.

Mientras tanto, los académicos se hallan organizando y analizando material relacionado con las bases psicológicas del lenguaje, los mitos, la religión, el arte y la ética. Y es de remarcar que las revelaciones sobre la mente que emergen del campo de la psicología y la biología nos ofrecen pistas sobre la antigua tecnología representada en los mitos y las leyendas.

Porque al final, se vuelve cada vez más evidente que la lógica, los gestos heroicos y las hazañas del mito están hoy con nosotros.

Por supuesto, en aquél momento no tenía ni idea de que estaba recreando una historia arquetípica. El sólo pensarlo me hubiera llenado de horror. Me acuerdo que allá por los 80's cuando estaba luchando con el problema de por qué había nacido con semejante signo de interrogación en mi mente, sin una salida aparente para toda esa energía interrogativa, sabía que debía comenzar a hacer algo.

La decisión me llevó, paso a paso, a la comunicación con los Cassiopaeans -posiblemente yo misma en el futuro - quienes dijeron:

Te hemos ayudado a construir tu escalera paso por paso. Porque tú lo pediste. Y tú lo pediste porque era tu destino. […] Tú has pedido tener el "poder" para resolver los temas más importantes de toda la realidad. Y hemos estado asistiéndote en tu fortalecimiento.

[1] Fulcanelli, The Dwellings of the Philosophers, 1999, Archive Press, Boulder .

Continuar