GLOSARIO ESOTÉRICO

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Objetividad

En la usanza general, la objetividad es la capacidad de ver las cosas como son. El esfuerzo por alcanzar la objetividad es un precepto central del trabajo esotérico, como es visto por el Cuarto Camino y la QFS (Quantum Future School). Observaremos la cuestión de la objetividad desde varios ángulos. Poca gente afirmará que la objetividad o la Verdad son indeseables como tal, pero muchos embarrarán el panorama de varias maneras.

Primero, antes de que podamos hablar de objetividad o de la falta de ella, debemos reconocer que existe un mundo exterior y una separación considerable entre este mundo y el observador.

Por ejemplo, 'cogito ergo sum'(pienso luego existo) de Descartes propone que la única realidad conocible es pensada y que el mundo exterior es conocible, y así podría llegar a existir inclusive sólo en el pensamiento del pensador. Esto es llamado solipsismo y es lógicamente una proposición posible pero genera una suerte de encrucijada filosófica sin salida. El concepto de objetividad tiene poco o nada de lugar en semejante sistema.Otros, como muchos promotores de la New Age, reconocen que hay una realidad pero afirman que en verdad todo en esta realidad es uno y que esta realidad es una ilusión compartida, provocada por la creencia que tiene el participante de esta misma realidad. No hay objetividad alguna, aparte de las creencias compartidas, que dé la apariencia de un mundo consistente acerca del cual es posible decir cosas.

Este argumento es una suerte de confusión de niveles. Podríamos llegar a estar de acuerdo en que el Universo es, en algún nivel fundamental, un resultado de la consciencia. Al menos muchas tradiciones y fuentes canalizadas en los tiempos modernos así lo afirman. Esto no implica que el nivel humano de experiencia responda al pensamiento humano en algún sentido obvio o significativo. La experiencia de la 'creación consciente'  por parte del pensamiento humano en el sentido de la realización del deseo, es escasa y rara. Si el hombre fuera Dios, los pensamientos podrían llegar a crear, pero el hombre no es Dios, ni se vuelve tal, con tal sólo insinuarse a si mismo que ya es Dios.

La física cuántica demuestra consistentemente los efectos del observador. El estado de un sistema no puede ser conocido sin medida, y la medida afecta al sistema. No está claro si la medida puede ser completamente definida sin involucrar la consciencia en cierta fase del proceso. En este sentido, el 'conocimiento objetivo' del estado de pre-medida específica de un sistema no es posible, a menos que formulando modelos de estadísticas que se puedan verificar. Estos son 'objetivos' en la medida en que corresponden a la observación. De esta manera podría ser aplicado un criterio de conocimiento objetivo. Si bien no es determinista desde la perspectiva humana, la naturaleza no es arbitraria.

En filosofía, el pensamiento fenomenológico y hermenéutico ha surgido como una respuesta al naturalismo. Esta critica a la dicotomía estricta del observador/observado inherente en el pensamiento anterior. Por ejemplo, la psicología conductista podría ser criticada por 'objetivar' el sujeto experimental, de hecho negando a priori que es una entidad consciente. Sin embargo, reconociendo que en muchas situaciones, el marco observacional no está para ser separado de la observación, de ninguna manera invalida el precepto de objetividad tal como lo entendemos, sino que por el contrario lo enriquece indicando hechos acerca del mundo.

La objetividad no debería confundirse con el reduccionismo. El reduccionismo o determinismo afirma que dada la información completa del estado de un sistema, es posible hacer arbitrariamente proyecciones de lejano alcance del estado del sistema hacia el pasado y el futuro. Hay muchos obstáculos para el determinismo estricto, empezando desde la incertidumbre cuántica, algunos probables efectos no-locales, ya que ningún sistema es absolutamente cerrado, posibles efectos de la consciencia y de la [[observación del observador]], etc. En parte relacionado con esto, Godel ha demostrado que un sistema no puede ser su propio sistema, es decir, contener completo conocimiento de sí mismo. Esto sugiere que adquirir conocimiento objetivo de cualquier universo desde adentro, es una búsqueda de final abierto.

La objetividad, en el sentido aquí entendido, implica "realismo epistemológico", lo cual es simplemente la proposición de que la realidad es conocible por muchos observadores en una manera compatible y libre de contradicción. Esto no implica que la identidad absoluta de la experiencia o experimento fuera posible, sino que propone que una aprensión del mundo compartido entre observadores múltiples puede ser abordada, inclusive mientras los observadores no pueden ser enteramente o demostrablemente libres de todo prejuicio o 'error de lectura'.

En un entorno social, la palabra objetividad es a veces empleada para significar la ausencia de emoción, o en el sentido de escuchar a todas las partes de una situación. Una 'evaluación objetiva' en ese sentido podría ser el común denominador de todas las afirmaciones hechas acerca de una cuestión. El término no es empleado en este sentido en el presente trabajo. Primeramente, notamos que si la objetividad está para ayudar al conocimiento de todo lo que es, no puede empezar con la premisa de declarar a priori que alguna parte de la situación observada simplemente no existe o es irrelevante. Segundo, podemos notar que el promedio de una mentira y una verdad sería una media-verdad, de esta manera hacer un promedio de vistas no es un medio fidedigno, ni verdaderamente objetivo de conocimiento.

Especialmente en lo que respecta a cuestiones de interacciones humanas, la completa objetividad podría ser esquiva, pero si bien no podemos comprobar las afirmaciones, podemos dar un criterio del método.

Desde el punto de vista del trabajo esotérico, la verdad o la objetividad deberían ser el objetivo principal de una persona, en otras palabras, 'conocer a Dios'. El estudio del universo no puede estar enteramente separado de esto. Sin embargo, para propósitos esotéricos no podemos usar el criterio del conocimiento directamente copiado de las ciencias naturales. La naturaleza interna del trabajo requiere una cierta apertura y buena fe, o al menos la suspensión de la incredulidad. Después de esto, la verificación interna de los preceptos esotéricos podría ser posible. Debido a la naturaleza personal y experimental de muchas observaciones, hacer un esfuerzo por la objetividad es inclusive más importante que en las ciencias naturales, donde esta objetividad es ya más verificable.

Además, no podemos excluir del trabajo esotérico el estudio y trabajo sobre las emociones. La psicología busca lograr conocimiento fidedigno de las emociones por medio de experimentos, cuestionarios y métodos estadísticos. Esto funciona hasta cierto punto en el 'hombre exterior' pero no es directamente un abordaje viable en el trabajo esotérico. Las cifras no son elevadas y los asuntos relevantes en cada caso podrían ser totalmente distintos, de ahí que un abordaje mecánico 'en serie' sea problemático.

Gurdjieff hace hincapié sobre el hecho de lograr un/a razón /razonamiento y una consciencia objetivas a lo largo de su relato en sus Cuentos de Belcebú. Podríamos decir que la emoción objetiva es posible, en el sentido de que el centro emocional transmita información acertada sobre el estado emocional del ambiente. La consciencia objetiva es ver simultáneamente el estado emocional de uno mismo, y su respuesta a un estado y acciones más amplios de sí mismo. Empleando las palabras de Gurdjieff, algunos impulsos son propios del hombre que ha 'logrado desarrollar una razón y consciencia objetivas'. Estos son generalmente de un carácter ético tal como la buena voluntad y la consideración hacia otros, el esforzarse por el conocimiento, por pagar por el surgimiento propio, etc..

La QFS (Quantum Future School- Escuela del Futuro Cuántico) liga la búsqueda de la objetividad a la dualidad entre el Servicio A Otros y el Servicio A Sí mismo. La subjetividad pronunciada y el pensamiento deseoso son vistos como sellos distintivos del SAS. Si los pensamientos o la disposición general interna de los observadores afecta la realidad, entonces la QFS sugiere que esto pasa de la manera siguiente: la observación que corresponde a la realidad crea el orden en el sistema del observador/observado. La observación que no coincide con la realidad reduce la cantidad de orden y se suma a la entropía del sistema del observador/observado. Orden y entropía son opuestos. Entropía corresponde a la pérdida de información y consciencia; orden corresponde a la creación. De hecho, al intentar forzar su propio concepto de la realidad sobre el universo, los magos y pensadores deseosos, suman más al caos y la disolución. Cualquier creación compatible con la polaridad del servicio a otros, debe comenzar por el reconocimiento de lo que es y la acción que se necesita tomar basado en esto, no en una lectura parcial.
El tipo de acción podría ser elegido libremente, dependiendo de la polaridad con la cual el actor decide alinearse.

La objetividad está vinculada con el concepto del libre albedrío en el sentido de que el libre albedrío sin conocimiento de las posibilidades es incapaz. También, el albedrío que es mal informado no puede decirse que es libre porque está limitado por factores que están fuera de sí. Un conocimiento casi objetivo de sí mismo, incluyendo entonces el conocimiento de las tendencias típicas subjetivas de uno, es un prerrequisito para el libre albedrío. Ver en primer lugar Libre Albedrío para una discusión ontológica sobre semejante posibilidad. 

Ver: Libre Albedrío / TCTPR (Tú Creas Tu Propia Realidad) / Caos / Creación y Orden / Ser vs. No Ser / Consciencia